Después de que Mumia Abu-Jamal fue trasladado desde el corredor de la muerte al penal de mediana seguridad Mahanoy los oficiales carcelarios han tardado un mes en inventar un nuevo pretexto para mantenerlo en la Unidad de Celdas Restrictivas (RHU). Según una carta enviada por el equipo legal de Mumia Abu-Jamal el jueves, 12 de enero, este nuevo pretexto es su estilo de cabello natural, es decir, sus dreadlocks (comúnmente llamados ‘rastas’). Las autoridades del penal Mahanoy afirman que Abu-Jamal estará en “el hueco” hasta que corte el cabello.
Recordemos que ésta vieja táctica fue utilizada contra Mumia al principio de su reclusión. Fue castigado durante 8 años en Custodia Disciplinaria hasta que por fin las autoridades cambiaron su clasificación a principios de los ’90 ––sin que él cortara el cabello. Ahora tiene los dreadlocks hasta el suelo, un símbolo de su constante resistencia y una afirmación de vida y rebeldía contra un sistema de muerte.
Furiosos por no haber podido asesinar a Mumia por la vía legal, las autoridades buscan cualquier pretexto para enterrarlo vivo y apagar su lucha. Durante muchos años, Mumia ha seguido luchando a través de sus escritos. Pero las nuevas condiciones directamente afectan su posibilidad de recibir información y difundir su palabra. No tiene acceso a los informes noticieros, tampoco a sus materiales legales o a su máquina de escribir. Tiene unos pocos pedazos de papel para escribir apuntes con un lapicero de caucho flexible. Sólo le permiten tener cuatro libros en su celda. Antes, Mumia pudo usar una de sus llamadas telefónicas cada semana para comunicarse con Prison Radio, donde grabaron sus ensayos en su propia voz. Pero ahora le niegan esa llamada. Hay luces fuertes prendidas en su celda las 24 horas del día. No sale de su celda sin grilletes, incluso para ir a las regaderas o para recibir una visita. Sus visitas son pocas y cortas, sin contacto físico, en un locutorio de vidrio. Está sometido a revisiones denigrantes tanto antes como después de la visita. Las autoridades tardan mucho en entregarle sus cartas, si es que las entregan. Solo le permiten una llamada breve a su esposa. No tiene acceso a alimentos adecuados ni a la tienda del penal.
Cabe señalar que decenas de miles de presas y presos recluidos en los huecos de cada penal a lo largo del país están sometidos a semejantes condiciones denigrantes y brutales y que durante el año pasado hemos visto una huelga de trabajo, dos huelgas de hambre y otros protestas contra dichas condiciones desde dentro de las prisiones.
ENVÍA UNA TARJETA O CARTA A MUMIA:
Mumia Abu-Jamal, AM 8335
SCI Mahanoy
301 Morea Road
Frackville, PA 17932
¡LIBERTAD A MUMIA!
¡PRESOS POLÍTICOS LIBERTAD!
¡NO A LAS UNIDADES DE TORTURA!
¡ABAJO LOS MUROS DE LAS PRISIONES!
Amig@s de Mumia de México
No hay comentarios:
Publicar un comentario